La ultima putada
Después de todo un dia perdido, consigo que el Juzgado de Vigilancia Penitenciaria, reclame a la oficina de Régimen del Centro Victoria Kent, que revise mi liquidación de condena. Ohhhhhhhh.. Perdon se ma habia olvidado ponerle la redención extraordinaria que hace referencia. Aun así y después de acudir al centro a que el olvidadizo funcionario realice un nuevo calculo, vuelvo a ver, la actitud de un pamplinas al que le dan igual 10 que 20 días. En fin, que supuéstamente el próximo martes debería irme, pero como este individuo y la administración penitenciaria siguen de esta guisa, pues como que me voy el próximo día 10 de agosto de 2006.
En fin, Fermín. Solo me quedan los dias de dormir de esta semana, y los de la semana que viene y despues el permisito. El jueves 10 de agosto, espero me llamen para decirme: Excarcelación, y por fin tocar el piano (poner mi shuellas una vez más en el patetico instrumento creado a tal fin para dejar constancia de todas las huellas digitales de mi mano, en un hoja obsoleta).
A partir de ese día solo quedará la reclamación de la responsabilidad civil, que en teoria debería abonar a los estafadores de seguros que iniciaron esta denuncia. En ese caso, es una cuestion de tiempo, y de jeta legal. La misma que han usado conmigo todo este tiempo.
(Joder, que mala lengua tienes hoy. Algunos llaman a esto desocializaión producida por la estancia en prisión. Y que razon llevan. Pero se quedan cortos. Es hiel, mala sangre, odio visceral, hacia un sistema montado por unos pocos para el beneficio de otros pocos, donde como siempre la justicia es igual a la pasta o poder que tengas en esta maldita sociedad).
A partir de aqui, dedicación exclusiva a mi empresa, a mi familia, a mi gente que es lo único que de verdad me importa. Lo demas se lo dejo a Zapa y aus colegas de profesión.