Con el corazon roto, el alma partida, y un mal sabor de boca
Así es como me he quedado, después de un día perdido, de un día en el que he visto lo que no quería ver, pero sabia que iba a pasar.
Ayer hable con los responsables de una empresa de la que nunca mas voy a hablar, pese a que a efectos legales sigue siendo la misma. Hoy he declarado como imputado, respecto de unas cosas, aunque la verdad, el tema tenia que ver mas con una juicio a la catalana, que con el asunto de fondo, aunque mi abogado ya se ha encargado de poner las cosas en su sitio.
Ahora bien, donde se ponen esfuerzos, donde existen abogados para una cuestión banal, resulta no existir la misma fuerza, para hablar y dialogar al respecto de una hija, de una niña maravillosa que cada día que pasa pierde la ausencia de su padre. Palabras de imberbes abogados, que se les escapan estúpidos comentarios de un inmadurez profesional, que deja mucho que desear, que hacen daño, que dan pistas, que crean rencor.
Me siento triste, me siento solo, pero ojo, no me siento hundido, lo digo para algunos. Solamente es pasajero, solamente es un instante minúsculo, una bajón en el tiempo.
Necesito amar, necesito que me amen, y eso no quiero decir que me falte, pues siento el calor de mis hijos, que no me falta. Con los que puedo hablar, con los que puedo sentir.
Me refiero, a algo mas especial, algo que me permita sentirme niño entre sus brazos, hombre entre sus piernas. Algo que me haga olvidar la ignominia, la falsedad que he vivido durante los últimos siete años, y que quite de mi boca el asqueroso álito que produce el solo recuerdo de mi pasado junto a una caterva de hipócritas falsarios, mal pensantes y envidiosos. Que me recuerde que la vida es otra cosa, que la envidia, la falsedad, la vaguería, la inutilidad, la falta de amor, no son la vida en si, sino meros accidentes de una vida especial, la mia.
Nunca mas hablaré de los innombrables, delo sinmorales, de los hipocritas, nunca más diré lo que pienso. No retirare lo que aquí esta escrito, ni escribiré nada más. Simplemente, sera un episodio abandonado, una parte de mi libro, una historia que no merece mas letras escritas en mi blog. Queda pues ahora en manos de letrados, si hubo o no competencia desleal, o si lo que realmente hubo, fue el respeto por unos clientes mal tratados, abandonados, a los que a día de hoy se les trata de confundir respecto de mi honorabilidad. Que mas da. Las cifras cantan, las estadísticas, no mienten, al menos en el tema del hosting.
Ahora, tratare de relajarme, dejaré que los ríos de mi vida sean compañeros de mi rostro enrojecido, que la ira de mis sentidos se aplaque en la soledad de mi domicilio, y mañana despertaré en otro mundo, en mi mundo. En el de los luchadores, en el de los ganadores.
Entre tanto, pediros compresión a aquellos que de mi esperáis, una respuesta, una solución, un trabajo bien realizado, porque la verdad, es que ni ayer, ni hoy, ni mañana, he estado en mi mejor momento.
Simplemente, necesitaba tocar el fondo una vez más, para coger el impulso necesario para salir con la fuerza requerida.
No se, pero tras ver la ultima notica de Hosting LMi, la verdad que me da la risa.
Parece que hasta sigas tu alli, porque las faltas de ortografia siguen.
Lo unico que no cambia desde hace meses es el rollo de que van a migrar, que van a mejorar, y no mejoran.
No te calientes, esa gente ya no tiene nada que hacer.
Sabes? Tras un día siempre va otro. Y lo bueno que tiene es que este nuevo día siempre nos puede traer una sorpresa, y por qué no la felicidad?, No decaigas.
Hay dias que la fuerza se te acaba, que el peso del mundo te llena de un profundo sentimiento de inferioridad, algunos lo llaman depresión.
La soledad, la falta de una compañera, de una valvula de escape a los sentimientos encontrados, y los avatares cotidianos, empequeñecen mi vida.
Pero bueno, no pierdo la esperanza de salir del fondo.
«La gentuza lo puede utilizar para undirte».
Me parece demasiado noble por tu parte la sinceridad con la que llevas las cosas, pero si eres tan trasparente hasta con tus estados de ánimo, es como llamar a los buitres que esperan que su presa desfallezca.
Kizás te metas demasiado en la piel de la gente que tiene problemas con la antigua empresa, y te deje algún que otro sin sabor, pero hay otra mucha más gente que espera que sigas adelante con tus proyectos y que consigas todos los éxitos posibles en tu nueva empresa, (ya que si pensamos de forma egoista, ganamos todos.
No tires la toalla, hay miles de personas que confían en ti, y otros tantos que admiran tu trabajo y tu forma de trabajar.
Que pases pronto tu bajón.
Un saludo